y siguen las firmas.....no serà JPM ni el Credit S......pero todo suma.......como decìa mi abuela, si tiene oreja de pato, pico de pato y pata de pato.....debe ser un pato !
En un mundo en el que sobra liquidez y persisten condiciones de tasas extremadamente bajas, se ha venido registrando un lento pero a su vez creciente interés por incorporar a las carteras de inversión títulos de economías emergentes.
En este sentido, cabe destacar que el Instituto de Finanzas Internacionales estima que el ingreso de capitales a estos países crecerá este año -nada más y nada menos- que un 33 por ciento.
Según el Instituto, en 2010 todos los emergentes (no sólo América Latina) recibirán un flujo de 746.000 millones de dólares.
¿Por qué ocurre esta situación? Básicamente porque la tasa de interés en Estados Unidos está por el piso y eso moviliza a los “dueños del dinero” a buscar otros destinos para sus fondos.
Y en estas idas y venidas que realizan los capitales en búsqueda de una mayor rentabilidad,
la Argentina figura en la lista de aquellos países más atractivos para desembarcar.
Sucede que las ganancias que ofrecen sus bonos en dólares resultan más que tentadoras para hacer un negocio de corto plazo.
¿Por qué los títulos argentinos resultan tan atractivos?
“Los bonos y los cupones se han convertido en estrellas casi indiscutibles del mercado local”, sostiene Sabrina Corujo, analista de Portfolio Personal.
En efecto, desde que se anunció el canje de deuda -y en lo que va de este segundo semestre- las ganancias acumuladas superan el 35% para los bonos en pesos, y rondan el 11% para aquellos nominados en dólares.
Además de este fuerte rally alcista, los expertos sostienen que aún hay suficiente margen para que los inversores se beneficien con fuertes subas a futuro.
¿Por qué este optimismo? Corujo destaca que “el panorama sigue resultando muy favorable. Y esto es así porque los vencimientos que va a tener que afrontar el país a corto plazo están bajo control. El proceso de desendeudamiento llevado a cabo en estos años permitió que hoy la Argentina tenga una deuda menor al 50% de su PBI, contra niveles del 166% que llegó a tener en 2002”.
“El año próximo vencen cerca de u$s16.000M. Pero si se resta lo que el Estado se debe a sí mismo esa cifra cae a u$s12.000M. Y ese dinero ya quedó contemplado con el fondo de desendeudamiento incluido en el Presupuesto 2011. Es decir, el Gobierno tiene el camino netamente despejado para el año próximo”, destaca la analista de Portfolio personal.
En conclusión: una foto económica positiva para el país y necesidades de financiamiento prácticamente nulas hacen que la inversión en títulos públicos siga conservando su atractivo.
Un hecho que no pasó desapercibido para los fondos de inversión fue la propuesta que le efectuaron los bancos al Gobierno nacional de emitir deuda a menos del 9 por ciento.
Con este anuncio, se reforzó la idea de que el riesgo país ya bajó al nivel de la tasa que ofrecieron los banqueros.
En otras palabras, los administradores de carteras ajustaron los precios-objetivo de los bonos a esa nueva rentabilidad esperada.
Y dado que existe una relación inversa entre rendimiento y precio, el efecto inmediato se vio reflejado en las cotizaciones.
Para todos los gustos
Para los expertos, se terminó la época en que se compraba cualquier título porque su precio estaba atrasado y aseguraba ganancias. Ahora el atractivo son las rentas.
A favor de los inversores, cuenta el hecho de que existen opciones para todos los gustos.
Los hay en pesos indexados por el costo de vida, o aquellos que ajustan por la tasa Badlar, que surge del promedio de lo que pagan los bancos por plazos fijos a 30 días de más de $1 millón.
También hay otros en dólares de corto, mediano y largo plazo. Con legislación argentina o de Nueva York.
Tampoco faltan los derivados, como los cupones que ajustan según la variación del PBI.
Claro está que no todos los inversores son iguales y algunos se muestran más propensos a incurrir en mayores riesgos.
Es por eso que iProfesional.com indagó sobre las recomendaciones efectuadas por los analistas de la city porteña para tres tipos de perfiles.
1. Perfil conservador
Entre las alternativas que brinda el mercado, el segmento que más se adapta a este tipo de ahorristas es el de duraciones más cortas en dólares.
”Para el inversor conservador la apuesta principal deben ser los títulos cortos en dólares donde se encuentran rendimientos del 7% y 8% anual”, sostiene Corujo.
En general, los analistas recomiendan a aquellos que no desean incurrir en demasiados riesgos, el Boden 2012 (RG12) y el Bonar V (AM11).
Ambos brindan un atractivo particular para aquellos tenedores que decidan mantenerlos hasta su vencimiento.
•Boden 2012: paga intereses semestrales y amortiza en 8 cuotas de 12,5%. Presenta un rendimiento competitivo (7,8%) y una duración modificada baja (1,3 años).
•Bonar V: paga interés en forma semestral y amortiza íntegramente al vencimiento. Su tasa también es atractiva (7%), junto a la de un cupón elevado (7%) y una duración modificada corta (0,5 años).
2. Perfil moderado
“Para un inversor que desee tomar un poco más de riesgo en relación a otro de perfil más conservador, la parte media de la curva en dólares es muy atractiva. En particular, el Boden 2015 en moneda extranjera y el Bogar 2018 en pesos”, apunta Corujo.
A la hora de identificar el menú de opciones, los analistas destacan estos títulos:
•Boden 2015 en dólares (RO15): ofrece un rendimiento alto (10,2%) y una paridad relativamente baja (88,9%). Para aquellos que decidan mantenerlo hasta su vencimiento este título les representa un interesante potencial de apreciación del capital.
•Bogar 2018 (NF18): es en pesos. Paga intereses en forma mensual y amortiza en cuotas mensuales y consecutivas. Es la mejor opción dentro de la curva de rendimientos de bonos ajustables por inflación.
•El Bonar X (AA17): es en dólares. Ofrece un cupón elevado (7%), con una alta tasa de retorno, 11,2 por ciento.
•Bonar 2014 (AE14): supone un buen flujo dado que paga intereses trimestrales, con cupón elevado: Badlar + 2,75 por ciento.
3. Perfil agresivo
También el mercado ofrece opciones para los menos temerosos que quieran apostar a una mayor rentabilidad.
“Para los que buscan un mayor riesgo, incluso superior al de un perfil moderado, existe potencial de suba en la parte larga de la curva, en especial en pesos. Ahí se encuentran rendimientos del 9% o 10% más CER”, menciona Corujo.
La analista de Portfolio subraya, además, que “no se pueden dejar de lado los cupones atados al PBI, que siguen siendo uno de los instrumentos más atractivos, aunque no son para cualquier inversor”.
Su potencial de apreciación está dado por la expectativa de un fuerte crecimiento de la actividad económica del país, lo que les permite ofrecer buenos rendimientos a sus poseedores en 2011.
En general, los expertos afirman que, de mantenerse este escenario, en el que se descarta cualquier tipo de decisión oficial en contra de los mercados, es recomendable comprar bonos argentinos.
“Mi recomendación en este momento pasa por incorporar a las carteras, fundamentalmente tres títulos: BONAR X, el PR13 y el cupón atado al PBI en pesos”, destaca Hugo Scopetani, director de Sudamericana de Finanzas Sociedad de Bolsa.
El ejecutivo fundamenta su recomendación en que “el primero cotiza con un importante descuento con respecto a los demás bonos argentinos".
Con respecto al cupón atado al PBI, Scopetani lo califica como "una de las inversiones más atractivas, dado el impulso que le brindan las revisiones al alza de las estimaciones de crecimiento y la baja de la tasa de descuento”.