alzamer escribió: ↑
A igual cantidad, sube la demanda.
La demanda no cae porque si, es como todas las cosas en la vida , causada.
Puede haber una explosión , una guerra , que obren como causa externa y la modifiquen.
Pero dejando de lado esos hechos impredecibles, sépase , que si la cantidad se mantiene quieta la
DEMANDA SUBE.
Y eso ocurre porque la gente si necesidad de estadísticas, percibe que los pesos son los mismos, y tiende a guardarlos.
Como en argentina la tasa de política monetaria es muy elevada aún, la gente tiene a guardarlos en plazo fijos, que han crecido mucho.
Eso es un peligro potencial que hasta ahora ha sido abortado por el resultado fiscal primario y las ventas de mep.
Es claro que no se puede seguir así de modo permanente, y de debe aprovechar la oportunidad que hay de bajar las tasas, para que no haya costo financiero del BCRA y del tesoro.
En la última licitación, por primera vez , se rechazó parte de lo ofertado para no convalidar tasas más altas.
Además, simbólicamente , no se tomaron un pequeño % de las Leliq ofrecidas por los bancos.
Si llegara a SER POLÍTICA NUEVA, entonces vamos a una fortaleza monetaria más permanente.
La demanda es una variable poco dependiente de la cantidad, exceptuando los momentos en que se provoca un estallido por fenómenos sociales, como profecías autocumplidas...
A mayor demanda, una autoridad monetaria responsable puede y hasta debe emitir para mantener relativamente estable el valor de la moneda. Ante una caída de demanda, debe esterilizar. Se trata de estabilizar otra variable dependiente, que es el valor de la moneda, para mejorar su desempeño como unidad de cuenta, uno de sus roles fundamentales...
Pero aún por fuera de estos fenómenos está lo que los agentes hacen con el circulante, y eso se manifiesta en la velocidad de circulación. Si los agentes se desprenden tan rápidamente como pueden del circulante porque le asignan poco valor, se produce inflación y devaluación, aún sin variación de la cantidad circulante. Sobre este fenómeno es que debería incidir la tasa de interés, ya que de allí surge una tasa de interés natural que sería la diferencia entre el valor esperado de la moneda en un determinado período de tiempo contra el de algún activo de referencia estable. La autoridad monetaria debería aproximar y hasta superar su tasa de interés de política monetaria a esa tasa de interés natural para ir esterilizando el circulante excedente, y frenando esa velocidad de circulación excesiva... Pero si la tasa de interés no llega nunca al valor necesario no se reduce la velocidad de circulación, no se anclan las expectativas y no se puede disminuir la tasa de interés sin que eso signifique echar más leña al fuego inflacionario y devaluatorio...
Pero bueno, las políticas monetarias son fenómenos muy complejos y andan dando vuelta demasiadas ideas erróneas basadas en monetarismos berretas....