Una manera de evaluar la credibilidad del plan de estabilización anunciado es calcular, bajo ciertos supuestos, el valor que tomarán en el futuro las variables de política monetaria que el BCRA no anunció (ver nota más técnica aquí[2]). Suponga que el Banco Central y el Tesoro pagan los intereses de su deuda endeudándose hasta junio de 2019. A partir de julio de 2019 el servicio de la deuda es financiado con emisión de dinero con el objetivo de mantener el ratio de deuda en pesos a PIB constante. La deuda en pesos del Tesoro (ver aquí) más la deuda no monetaria del BCRA (LEBAC + LELIQ + pases pasivos aquí) es hoy aproximadamente 6.8% del PIB[3]. Para proyectar la deuda sobre el PIB en junio de 2019 hay que multiplicar este número por la tasa de interés nominal corregida por la inflación y por el crecimiento de la economía por nueve meses. Suponiendo que esta tasa de interés corregida es 10% por año, la deuda sobre PIB en junio de 2019 sería aproximadamente 7.5% del PIB. El servicio de esa deuda a una tasa real de 10% requiere 0.75% del PIB por año. Manteniendo constante el ratio de base monetaria a PIB, que hoy es aproximadamente 7.5% del PIB, la emisión monetaria necesaria para financiar el servicio de esta deuda es aproximadamente 10% anual. Una emisión monetaria estable de 10% anual, combinada con una tasa de crecimiento de la economía del 3% anual
implica una inflación estable del 7% anual.
Los cálculos del párrafo anterior le dan mucha credibilidad al plan de estabilización. Claro está, en un contexto en el cual la autoridad fiscal logra un superávit primario en 2020 y recupera el acceso al mercado de crédito internacional. El escenario descrito supone que la autoridad monetaria financiará toda la deuda en pesos, incluso la del tesoro, con emisión de dinero. En el cómputo de la deuda en pesos no he neteado la deuda del BCRA con el tesoro, por lo tanto la deuda es mayor a la verdadera. La tasa de interés real corregida por crecimiento de 10% anual es sumamente alta, considerando que la tasa de interés real sobre la deuda en pesos del sector público consolidado hoy es cercana a cero o negativa. Aún si esta tasa real fuese del 15% de aquí a junio de 2019 y 10% a partir de esa fecha,
la inflación de 2019 sería menor a un dígito. Mantener la base monetaria constante sobre PIB en un contexto en el cual la tasa de interés sobre los depósitos bajaría dramáticamente acompañando la inflación también subestima la expansión monetaria que sería necesaria para servir la deuda[4].
Asume muchas cosas y suposiciones que no sabemos si se van a cumpir, quien cree que la inflación de 2019 va a ser menor a un digito? La verdad que las tasas no paran de subir...esa es la realidad