Siguen entrando personajes al call. El tipo de cambio es favorable, o el hambre importante. El que nace para pito...
En cualquier momento ingresa a escena un brujo.
Leí por ahí que en la segunda guerra los ingleses pincharon la inteligencia alemana contratando a un brujo que les indicaba los eventos que los otros inmersos en alto pe** místico seguramente seguirían. La superstición les resultó letal a esos delirantes. Seguir a los astros puede (o no) resultar favorable, pero sin dudas el sentido común fue derminante.
Por mi parte nuevamente me venció el aburrimiento. Con el gusto de que me hayan leído, y esperando no volver a leerlos nunca más, cordialmente
