QuikFCO escribió:El Gobierno premia a quienes trabajan en negro, asignándoles un subsidio por hijo. Por otro lado castiga a quienes también trabajan en negro, prohibiéndoles comprar dólares.
El que trabaja en negro y quiere vender dólares, no tiene ningún obstáculo para hacerlo. O sea, el fundamento de la prohibición no es castigar al evasor. Es la misma excusa que puso Cavallo en el 2001: "si Usted está en blanco utilice el débito y listo, para qué quiere el efectivo".
No veo la coherencia en la política del gobierno, y sí veo similitud en el espíritu de ambas medidas: evitar una corrida cambiaria y bancaria y en su fundamentación política
La gran masa de los trabajadores en negro, no tiene opciones; o aceptan lo que los patrones le ofrecen o se siguen desocupados.
Dentro de los trabajadores en negro existe un sector de cuenta propistas, vendedores ambulantes, albañiles, Etc., que tienen ingresos muy irregulares generalmente de subsistencia.
Si bien son parte de la economía en negro, no la disfrutan, son víctimas.
Mesclar laburantes en negro con escasa aptitud de ahorro, en la batalla del dólar, resulta como mínimo equivocado.
Quienes más, pueden recibir planes asistenciales????; quizás un sub grupo de piolas todo terreno; estafadores que no aportan al sistema y sí tratan de obtener ventajas del mismo.
La real contradicción es meter a las víctimas de la precarización en la misma bolsa con sus aprovechados empresarios victimarios.
Siempre volvemos a lo mismo, la culpa es del más débil.
Pensalo
José