Mensajepor ganamos » Mar Feb 08, 2011 11:51 am
Estrategia en Argentina (Raymond James)
Durante el último mes el mercado se caracterizó por un muy bajo volumen tanto en el mercado
de acciones como de renta fija, con poco flujo desde el frente local como extranjero. Parte de
dicha apatía la atribuimos a una baja entrada de capitales a mercados emergentes,
especialmente a países de alto beta. Sin embargo, seguimos siendo constructivos con
Argentina en el mediano plazo dado que los fundamentos a nivel macro ameritan un menor
nivel de Spreads (85pbs) que es el promedio del spread de los llamados países frontera.
Recomendamos tomar posiciones defensivas frente a una posible toma de ganancias en los
mercados internacionales y especialmente en mercados emergentes.
Con respecto a las tasas de interés domésticas, en los últimos días de diciembre el Banco
Central (BCRA) presentó el Programa Monetario 2011, confirmando el sesgo expansivo que se
había evidenciado desde mitad de 2010. El mismo estaría sustentado en tres pilares: la compra
de divisas, las transferencias al Tesoro para cubrir sus necesidades financieras y la expansión
del crédito. Desde nuestro punto de vista, este último factor se dará en paralelo a una
desaceleración en el crecimiento de los depósitos (en un marco de tasas de interés reales
fuertemente negativas), incrementando el ratio de créditos/depósitos y poniendo una presión
moderada sobre la tasa de interés. En este contexto de tasas estables con riesgo al alza,
privilegiamos instrumentos de renta fija a tasa variable.
Por el frente cambiario, con un dólar sin mayores sobresaltos (esperamos una depreciación
que ronde el 8-10% en 2011) y una inflación de entre 25 y 30%, la competitividad de la
economía medida por el índice de tipo de cambio real multilateral (ITCRM) seguiría
deteriorándose. Si bien todavía existe un abundante colchón cambiario (la argentina es 70%
más competitiva que en la convertibilidad), un escenario de mayor debilidad del euro, del real y
del precio de la soja podrían renovar la presión cambiaria, sobre todo después de celebradas
las elecciones en octubre.
En lo que respecta al mercado accionario comenzamos a observar ciertas señales de
agotamiento que pueden ser justificadas luego de meses de excelente performance relativa.
Esperamos el comienzo de la temporada de balances anuales para analizar tendencias y
entender el desenvolvimiento de las líneas de balances corporativos en un escenario de
precios en ascenso. A pesar de la contracción de las primas de descuento que evidenciaron en
general las empresas argentinas en el último año, creemos que todavía hay valor por descubrir
aunque deberemos ser cautos en función del contexto global antes mencionado y al proceso
electoral que comenzara a hacerse notorio en los próximos meses y que, como es sabido,
agrega una cuota de incertidumbre adicional.