Mensajepor profiterol » Mar Ene 05, 2010 9:03 am
Por algo Redrado dice, en la presentaciòn anticipando el programa monetario 2010 : " ... en contextos como el nuestro -de instrumentos acotados-, la orientación anti-inflacionaria del conjunto de la política económica es absolutamente
crucial. Me refiero a la política fiscal, la política salarial, la política de competencia junto
con el trabajo de la política monetaria tanto a partir del estricto control en el crecimiento
de los medios de pago (recordemos que la tasa de variación de los agregados monetarios
muestra una clara tendencia decreciente) como de la administración del tipo de cambio
(por primera vez en décadas una devaluación significativa no se espiraliza). Y esto
involucra a todos los actores sociales responsables de fijar los lineamientos de las políticas
salariales, de ingresos, monetarias, fiscales y de competencia. No es concebible que el
Banco Central obtenga resultados concretos si otras ramas de la política económica no
despliegan acciones consistentes capaces de estabilizar las expectativas de alzas futuras de
los precios y compatibles con un entorno de creciente estabilidad monetaria. Eso sí,
seguiremos utilizando las herramientas disponibles (y fortaleciendo su poder de acción)
para continuar un sendero decreciente de la tasa de inflación."